Muchas personas se preguntan si este verano podrán disfrutar de unos días de descanso en la playa, mientras muchas otras se están haciendo a la idea de que este año se quedarán en casa. Sea como sea, una empresa italiana parece haber dado con una solución efectiva para evitar la propagación del coronavirus en la playa.
Cubículos de plástico transparentes para separar a los bañistas
La idea es mantener la distancia de seguridad obligatoria que en estos momentos es una de las medidas clave para evitar el contagio. El invento consiste en unos cubículos de plástico que sirvan para aislar a las personas. Como es lógico, este sistema es transparente para que el bañista pueda ver todo lo que sucede a su alrededor.
Su inspiración, las estructuras de residencias y hospitales
La empresa en cuestión se llama Nuovaneon y el encargado de sus ventas, Marco Giusti, ha explicado que su idea se inspiró en las estructuras divisorias que utilizan las residencias y hospitales para mantener a salvo a los ancianos y enfermos.
¿Cómo serían y cómo funcionarían?
Este proyecto se encuentra en su primera fase y aún hay que investigar un poco más, aunque lo que tienen claro es que se tratará de elementos portátiles creados a partir de estructuras de hierro o aluminio y pantallas de plexigas o policarbonato. Esta medida buscaría la protección de los bañistas para evitar que le llegasen los estornudos y la tos de las personas que se encuentran próximas.
Según parece, estos habitáculos podrían alcanzar una altura de 4,5 metros por 1,5 metros de ancho, el espacio suficiente para poner una sombrilla, una tumbona y el resto de útiles que solemos llevar a la playa. De cualquier forma, el tamaño se podría ajustar a las necesidades de cada bañista.
(Foto: Nuovaneon)