Parecía imposible, pero este 2020 está siendo sorprendente en todos los sentidos. Isabel Pantoja y Kiko Rivera, quienes en numerosas ocasiones se habían dado grandes muestras de amor en público de amor maternofilial y habían formado un bloque contra la tercera en discordia en la familia, Isa P, están irremediablemente peleados y el motivo no es otro que la herencia de Francisco Rivera, quien falleciera en 1984 pocos años después del nacimiento del DJ. A muchos les ha sorprendido las palabras tan duras que, debe ambas partes se han dedicado, preguntándose por el origen de las mismas. Sin embargo, la causa parece clara si se echa la vista atrás y es que tanto Kiko Rivera como Isabel Pantoja tienen graves problemas de dinero a causa de una serie de deudas que ambos llevan arrastrando desde hace años.
El dúo en cuestión, siempre ha sido Kiko Rivera el que ha hablado sin tapujos de sus problemas económicos, algo que viene haciendo desde hace tiempo, puesto que, a causa de la crisis sanitaria causada por el coronavirus, el hijo de Isabel Pantoja se ha visto obligado a pedir diversas prestaciones sociales por cese de actividad y falta de ingresos declarados, llegando a vivir durante meses con un subsidio de 700 euros. Los problemas de Rivera no han hecho más que crecer, puesto que el elevado tren de vida que ha llevado la lleva en estos momentos a tener muchos más gastos que ingresos, por lo que su deuda no hace más que aumentar. Toda la tourné realizada por los platós de Telecinco le estarían ayudando a sanear sus cuentas, pero no resultaría suficiente para satisfacer a sus acreedores.
Hoy os traigo una foto que mis amigos sevillistas me dirán"Que aseee mamonaaaa"
— KIKO RIVERA (@riverakiko) October 8, 2020
Pero mi padre era Bético y aunque yo sea Sevillista...adoro esta foto pic.twitter.com/arBQ1bPW33
Los problemas de Kiko Rivera comenzaron hace 11 años, en 2009 cuando compró una casa junto con la entonces su compañera, Jessica Bueno, adquiriendo una hipoteca por valor de 338.000 euros a 20 años. Tras la separación de la pareja, se decidió poner la casa en alquiler para cubrir los gastos que generaba y pagar parte de la hipoteca, resultando la experiencia todo un fracaso, puesto que fue arrendada a unos amigos suyos que acabaron okupándola, haciendo sino que su deuda aumentase, en especial la contraída con la comunidad de vecinos de esta finca, a los que debe un total de 30.000 euros, ya que, según éstos, el DJ jamás habría abonado la couta de 280 euros mensuales que se le presupone y en el momento de su compra ya pesaba un descubierto de 8.000 euros sobre la vivienda, algo que según él mismo siempre habría defendido, no fue informado en su momento.
Además, Rivera nunca habría sido especialmente hábil manejando sus cuentas personales, descuidando sus gastos personales hasta un extremo difícil de entender para aquellos que vivimos ajustados a un presupuesto mensual. Uno de los que fuera sus mejores amigos, el también televisivo Rafa Mora, habría relatado una serie de episodios en los que se pone de manifiesto el escaso control de las finanzas del hijo de Isabel Pantoja, entre el que destaca el momento en el que gastó 25.000 euros de una vez en unos grandes almacenes para comprar ni más ni menos que 1.000 películas en formato Blu-Ray. El ex tronista también contó durante una de sus últimas intervenciones en Telecinco que Rivera también adquirió en su momento un televisor que le habría costado alrededor de 20.000 euros, una cantidad que ronda los ingresos anuales de un español medio.
Foto: Telecinco
Parecía imposible, pero este 2020 está siendo sorprendente en todos los sentidos. Isabel Pantoja y Kiko Rivera, quienes en numerosas ocasiones se habían dado grandes muestras de amor en público de amor maternofilial y habían formado un bloque contra la tercera en discordia en la familia, Isa P, están irremediablemente peleados y el motivo no es otro que la herencia de Francisco Rivera, quien falleciera en 1984 pocos años después del nacimiento del DJ. A muchos les ha sorprendido las palabras tan duras que, debe ambas partes se han dedicado, preguntándose por el origen de las mismas. Sin embargo, la causa parece clara si se echa la vista atrás y es que tanto Kiko Rivera como Isabel Pantoja tienen graves problemas de dinero a causa de una serie de deudas que ambos llevan arrastrando desde hace años.
El dúo en cuestión, siempre ha sido Kiko Rivera el que ha hablado sin tapujos de sus problemas económicos, algo que viene haciendo desde hace tiempo, puesto que, a causa de la crisis sanitaria causada por el coronavirus, el hijo de Isabel Pantoja se ha visto obligado a pedir diversas prestaciones sociales por cese de actividad y falta de ingresos declarados, llegando a vivir durante meses con un subsidio de 700 euros. Los problemas de Rivera no han hecho más que crecer, puesto que el elevado tren de vida que ha llevado la lleva en estos momentos a tener muchos más gastos que ingresos, por lo que su deuda no hace más que aumentar. Toda la tourné realizada por los platós de Telecinco le estarían ayudando a sanear sus cuentas, pero no resultaría suficiente para satisfacer a sus acreedores.
Hoy os traigo una foto que mis amigos sevillistas me dirán"Que aseee mamonaaaa"
— KIKO RIVERA (@riverakiko) October 8, 2020
Pero mi padre era Bético y aunque yo sea Sevillista...adoro esta foto pic.twitter.com/arBQ1bPW33
Los problemas de Kiko Rivera comenzaron hace 11 años, en 2009 cuando compró una casa junto con la entonces su compañera, Jessica Bueno, adquiriendo una hipoteca por valor de 338.000 euros a 20 años. Tras la separación de la pareja, se decidió poner la casa en alquiler para cubrir los gastos que generaba y pagar parte de la hipoteca, resultando la experiencia todo un fracaso, puesto que fue arrendada a unos amigos suyos que acabaron okupándola, haciendo sino que su deuda aumentase, en especial la contraída con la comunidad de vecinos de esta finca, a los que debe un total de 30.000 euros, ya que, según éstos, el DJ jamás habría abonado la couta de 280 euros mensuales que se le presupone y en el momento de su compra ya pesaba un descubierto de 8.000 euros sobre la vivienda, algo que según él mismo siempre habría defendido, no fue informado en su momento.
Además, Rivera nunca habría sido especialmente hábil manejando sus cuentas personales, descuidando sus gastos personales hasta un extremo difícil de entender para aquellos que vivimos ajustados a un presupuesto mensual. Uno de los que fuera sus mejores amigos, el también televisivo Rafa Mora, habría relatado una serie de episodios en los que se pone de manifiesto el escaso control de las finanzas del hijo de Isabel Pantoja, entre el que destaca el momento en el que gastó 25.000 euros de una vez en unos grandes almacenes para comprar ni más ni menos que 1.000 películas en formato Blu-Ray. El ex tronista también contó durante una de sus últimas intervenciones en Telecinco que Rivera también adquirió en su momento un televisor que le habría costado alrededor de 20.000 euros, una cantidad que ronda los ingresos anuales de un español medio.
Foto: Telecinco